domingo, enero 07, 2007

seco y en cámara lenta.

recluido y silente, con sus manos aferradas a los barrotes que le impiden circular por el ancho mundo, mira con deseo la salida. tras las murallas, el horizonte inescrutable. espera indeterminada y pretérita. lenta, fría, triste. animal enjaulado que merodea su forzado claustro, marcando las horas y los días con pasos repetidos y circulares.
por las noches soñandose a sí mismo tras los barrotes.

anticipándose a lo imposible. ideas meditadas una y otra vez, revisadas y ordenadas en prioridades.

y un día la ancha puerta se ha abierto. sin temor a nada, sin condiciones. libre.

y se queda de pie. una piedra, un perro asustado.
manos que aprietan su propio sudor. pánico.

hasta que la puerta se cierra.