domingo, diciembre 08, 2024

Autorretrato

 

Qué extraño

reconocerse en la forma irregular de los árboles viejos

en la rugosidad del pangue

la vellosidad escalando el brazo de una costilla de vaca

       el despliegue de sus dedos múltiples.


En la frondosidad espesa

recortada contra un crepúsculo mudo y austral

 - la indiferencia de sus nubes

   allí estoy.


Y en la umbra densa

en la humedad exsudada por las ramas negras

en el secreto abrazar de las raíces un fértil fango.


También allí me reconozco

en el tronco partido - sus astillas carcomidas, su carne expuesta -

en la telaraña inconclusa

y en la ternura del musgo.


No aventuro palabra en este santuario:

el tránsito de los insectos

el canto del chucao

son mi lengua ahora.


Su silencio

esta presencia plural y ubicua

me habla

y en ella

soy.