recolecto las piezas del puzzle que guardo en el bolsillo
los dedos titubeando ciegos y ansiosos
hasta que cojo una ficha
y dice "ahora"
sobre la mesa
la tabula rasa que soy se pregunta
cómo encaja el ahora entre las sillas y la radio
mis manos y la luz de un día a medias
y sin embargo al mismo tiempo
como quien se viera a sí mismo desde el otro lado de la ventana
observándome en mi cara de puntos suspensivos
allí sentado con las piezas en la mano
me retiro y vuelo
distante y más pequeña la figura desde la ventana
mientras desde esta habitación me figuro
a una imagen
yo mismo
zafarme de la gravedad
flotar entre las ramas y desde allí sin parar hasta las estrellas
lúcido al fin
de que allí abajo
que estaba despierto solo soñaba
la fabulación persiste
sostenida en el espanto de reconocer
que el puzzle está completo
sin falta
en su desorden
en su desengranado ser disgregación, todo, partícula y fragmento
las frutas maduran y los hombres duermen
como el que cree que entiende estas palabras
nada falta
tomar las piezas
y elegir la figura siempre nueva del instante siguiente